Las legumbres son alimentos importantes en la dieta, si no existen contraindicaciones particulares. De hecho, son bajos en grasa pero ricos en proteínas, fibra y micronutrientes.
De hecho, las legumbres son una de las mejores fuentes de proteínas vegetales y son ricas en vitaminas del grupo B, ácido fólico y minerales como zinc, fósforo, potasio, hierro, calcio y magnesio.
Entre sus propiedades y beneficios destacan que las legumbres favorecen la saciedad, ayudan a controlar el colesterol, son un alimento adecuado para diabéticos y una buena alternativa a la proteína animal.
Las legumbres son alimentos importantes en la dieta, si no existen contraindicaciones particulares. De hecho, son bajos en grasa pero ricos en proteínas, fibra y micronutrientes. De hecho, las legumbres son una de las mejores fuentes de proteínas vegetales y son ricas en vitaminas del grupo B, ácido fólico y minerales como zinc, fósforo, potasio, hierro, calcio y magnesio. Descubramos las cinco cosas que hay que saber sobre ellos.
Quienes sufran irritación intestinal deben evitar las legumbres, al menos hasta que se resuelva el problema. Las legumbres, al igual que otros alimentos que deben evitarse en este caso, tienden a fermentar, por lo que pueden agravar la situación.
Las legumbres son una excelente fuente de hierro, sobre todo para quienes no suelen consumir proteínas animales o lo hacen de forma muy limitada. Para que el hierro se fije mejor, conviene combinar su consumo con el de alimentos que contengan vitamina C (como los cítricos) o suplementos.
Combinar legumbres y cereales, mediante el consumo de sopas por ejemplo, es una forma estupenda de combinar las propiedades nutricionales de las legumbres con las de los cereales (que además contienen el aminoácido metionina). Según los expertos, las legumbres y los cereales no tienen por qué comerse juntos, sino que pueden ingerirse en distintas comidas a lo largo del día.
Los nutricionistas recomiendan el consumo regular de legumbres, hasta dos o tres veces por semana, precisamente porque son un alimento que contiene sustancias importantes para la salud intestinal y tiene una acción prebiótica. Obviamente, este consejo se aplica en ausencia de situaciones en las que las legumbres deban evitarse o restringirse.
¿Se pueden comprar legumbres frescas, secas o congeladas? ¿Qué es preferible? En realidad, no hay una respuesta única, depende de las preferencias y necesidades personales. Los congelados se cocinan bastante rápido, mientras que los secos, por ejemplo, tardan más en prepararse. En cuanto a las legumbres enlatadas listas para el consumo, es necesario comprobar bien los ingredientes adicionales.